jueves, 27 de octubre de 2016

LAS PENSIONES EN PELIGRO

Imagen del diario El País

La Reforma Laboral de 2010 del Gobierno Zapatero, que facilitó y abarató el despido, y la todavía más virulenta del Gobierno de Rajoy en 2012, que precarizó aún más el empleo y permitió la contratación abusiva, han mermado notablemente la caja de las pensiones.

La alta tasa de desempleo y la baja calidad y bajos salarios de los contratos que se crean, junto las bonificaciones y “tarifas planas” que el gobierno del PP vende como “ventajas al empresariado para la creación de empleo”, disminuyen drásticamente los ingresos por cotizaciones del Fondo de Reserva de las Pensiones.

Para equilibrar los gastos de la Seguridad Social, e incluso para comprar deuda pública, el gobierno de Rajoy, “ha metido la mano” sistemáticamente en la “hucha de las pensiones” hasta vaciarla, poniendo en riesgo la calidad y el futuro mismo de las pensiones.

En 2010, el Fondo de Reserva de las Pensiones superaba los 66.000 millones de euros. La Seguridad Social tenía superávit. Ahora mismo, apenas llega a 24.207 millones, y a este ritmo se vaciará en 2018.

Detrás de todo hay también una estrategia para promover la idea de que quien quiera pensión en el futuro, debe contratar planes privados con bancos y aseguradoras, que se frotan las manos viendo en ello un gigantesco negocio de futuro.

La solución pasa por impedir que el Gobierno pueda disponer arbitrariamente de cantidades del Fondo, y por incrementar los ingresos de la Caja de las pensiones acabando con las bonificaciones de la cuota de la Seguridad Social, aumentando las bases máximas de cotización, y estableciendo también vías de financiación desde los presupuestos.

Y por supuesto, derogar una reforma laboral que sólo trae precariedad y bajos salarios, pues sólo con empleo estable y salarios dignos será posible reconducir esta peligrosa tendencia que pone en peligro el presente y el futuro de las pensiones.



 Gráfico extraído de el diario El Mundo

Publicado en el "El ala izquierda de la Casona", del diario Viva Málaga del lunes 27 de octubre de 2016

martes, 18 de octubre de 2016

EL ALCALDE QUE ODIABA LAS CONSULTAS CIUDADANAS


El Pleno de la ciudad aprobó en enero de este año realizar una consulta a la ciudadanía sobre el destino de los terrenos de los antiguos depósitos de Repsol. Consultas similares se están realizando ya en otras ciudades como Sevilla, Valencia o Madrid, por no hablar de la larga tradición en ciudades europeas de Italia, Francia o Suiza. Sin embargo en Málaga, a pesar de la decisión unánime de todos los grupos municipales, incluido el PP, el alcalde nunca quiso realizar tal consulta.

Un Informe de abril de la Secretaría Municipal detallaba los requisitos y procedimiento para realizar la consulta aprobada por el Pleno, señalando que dicha consulta no podría realizarse si afectaba a la Hacienda Municipal, lo que debería dilucidar el Interventor Municipal. El Interventor emitió su Informe en julio pero, a pesar de solicitarlo reiteradamente todos los grupos municipales de la oposición, el alcalde hizo caso omiso y lo ocultó en un cajón durante tres meses, hasta hace unos días. Ni siquiera se dignó a denegar las solicitudes. La callada por respuesta. Y ello porque, como ahora hemos sabido, el Interventor avalaba la posibilidad de realizar la consulta ciudadana.

Es gravísimo este ocultamiento del Informe de Intervención durante tres meses a representantes públicos, y a la ciudadanía, pues supone una vulneración flagrante del derecho de acceso a la información para el ejercicio de nuestras funciones, y del derecho constitucional de participación política.

Igual que con la consulta aprobada sobre el futuro del edificio de los cines Astoria y Victoria, el alcalde y el PP, demuestran claramente su negativa a realizar consulta alguna. Pero el Informe de Intervención deja la vía abierta para cumplir el acuerdo unánime del Pleno, y consultar a la ciudadanía qué prefiere para los antiguos terrenos de Repsol: ¿rascacielos o un gran bosque urbano?


El pueblo debe tener la palabra y la decisión.

viernes, 14 de octubre de 2016

"Volver a empezar"... en los cines Astoria y Victoria


Con el título de la famosa película dirigida por José Luís Garci podría resumirse el periplo del edificio de los cines Astoria y Victoria. Para el Diccionario de la RAE,  “periplo” es “Viaje o recorrido, por lo común con regreso al punto de partida”.

Es lo que parece haber pasado con la manzana de los cines Astoria y Victoria, tras  años de indecisiones y contradicciones del Alcalde Francisco de la Torre, y tras el despilfarro de más de 20 millones de euros en su adquisición.

En 2010, el Alcalde decidió comprar el inmueble por 20 millones de euros. Ese altísimo precio fue consecuencia de las indecisiones del propio alcalde, que primero pensó en cambiar el uso de ese espacio, de cultural a residencial, para permitir a la inmobiliaria que lo había comprado construir viviendas de lujo; y luego cambió de opinión, y pagó a esa inmobiliaria 20 millones de euros de nuestro dinero, a precio de suelo para viviendas de lujo, no a precio de uso cultural.

Desde entonces, y a pesar del altísimo precio pagado, el Alcalde ha sido incapaz de darle un destino a la parcela, mientras mareaba a la ciudadanía con falsas promesas, cortinas de humo, y cuentos varios: ampliación de la Casa natal de Picasso, Caixa-forum, “Museo de los museos”, y hasta “supermercado gourmet”. Un día apostando por la rehabilitación de un edificio sin valor arquitectónico, y otro por la demolición y edificación nueva. Su apuesta consistía en realizar un concurso para una concesión demanial, ajustado a un pliego de condiciones que garantizara una propuesta rentable, daba igual cuál fuese el uso a que se destinara. Pero fracasaba una y otra vez.

En el pleno de enero de 2015 aprobó una moción de Carlos Hernández Pezzi para convocar un concurso público de ideas para definir el futuro de la manzana de los antiguos cines, y una moción de Izquierda Unida para definir antes el uso para dicha manzana.

Posteriormente, el pleno de abril de 2016 aprobó una moción del grupo municipal Málaga para la Gente para la celebración de una consulta ciudadana entre las opciones resultantes del concurso de ideas. La celebración del concurso de ideas, y la posterior consulta ciudadana, no sólo era la forma más participativa y democrática de decidir el destino de ese espacio central de la ciudad, sino la única vía para sacarlo del estado de abandono de demasiados años.

Sin embargo, el alcalde, en lugar de cumplir los distintos y reiterados acuerdos plenarios, acaba de anunciar la realización de un concurso de ideas, en el que además se valorará, por encima de otros criterios, la viabilidad económica del proyecto. Es decir, se hurta a la ciudadanía la consulta aprobada por el pleno con un pseudo-concurso, no sobre un proyecto de uso definido, sino sobre el proyecto más rentable, ya sea un supermercado o un bar con terraza.

Así, tras años de indecisiones y engaños, volvemos al mismo punto de partida, a la privatización de ese espacio sin proyecto definido, esta vez avalado por un pretendido “concurso de ideas” que no es un concurso arquitectónico o urbanístico, sino que se decidirá (por el equipo de gobierno) lo que sea más rentable.

En definitiva, “Volver a empezar”, pero después de haber malgastado más de 20 millones de euros de nuestro dinero.

Publicado en Opinión de la revista digital Málaga Actualidad, el 10 de octubre de 2016.

martes, 11 de octubre de 2016

"Vetusta" Málaga

Escultura al jesuita Tiburcio Arnáiz, en Armengual de la Mota, junto al Corte Inglés

Vetusta es el nombre de la ciudad en que se desarrolla la más famosa novela de Leopoldo Alas “Clarín”: “La Regenta”. Inspirada en el Oviedo de su época, en ella el célebre novelista recrea literariamente el microcosmos de una ciudad en la que sus habitantes viven entregados a la hipocresía, a una  religiosidad falsa y al conservadurismo moral y social. Según el diccionario “vetusta” significa extremadamente vieja, anticuada” y, por extensión,  conservadora.

Después de 21 años de gobierno municipal del Partido Popular y de 16 años de De la Torre en la alcaldía, Málaga es una ciudad cada vez más “vetusta”.

En estos años, mientras ciudades de similar entidad, como Sevilla o Zaragoza, revolucionaban su sistema de movilidad hacia un modelo más sostenible y moderno, en Málaga De la Torre ha seguido apostando por la hegemonía asfixiante del coche privado.

Mientras las ciudades, de toda Europa, han convertido en grandes zonas verdes y equipamientos públicos los antiguos suelos industriales antes periféricos, en Málaga De la Torre los ha destinado todos a grandes edificios, con un concepto del urbanismo desarrollista y del “pelotazo”.

Mientras otras ciudades modernas han adornado sus espacios públicos con obras escultóricas contemporáneas, en Málaga han proliferado como setas esculturas de santos, beatas y clérigos de rancio gusto.

Mientras las ciudades, de toda España y Europa, han destinado sus suelos públicos a equipamientos culturales, sociales y deportivos que mejoran la calidad de vida ciudadana, en Málaga De la Torre ha “regalado” suelo público por doquier a cofradías y al Obispado (recientemente la pista deportiva pública de La Térmica), permitiéndole apropiarse del patrimonio público, como la Catedral o el Hospital de Santo Tomás.

Málaga necesita pasar página del conservadurismo urbanístico y social en que la ha sumido De la Torre. Merecemos volver a ser una ciudad moderna, acorde al tiempo actual, y para el bienestar de TODOS y TODAS.

Publicado en El ala izquierda de la Casona del diario Viva Málaga, el lunes 10 de octubre de 2016

Imagen de la convivencia de peatones, ciclistas y tranvías en el centro de Zaragoza


martes, 4 de octubre de 2016

#SalvemosLaMundial: Cuenta Atrás



El pasado viernes, según el promotor del hotel de Hoyo de Esparteros, cumplía el plazo para acceder a los préstamos provenientes de la iniciativa “Jessica”, que permite la utilización de los Fondos Europeos FEDER para proyectos de renovación y desarrollo urbano.

Estos fondos europeos eran el último “clavo ardiendo” al que se agarraban promotor y alcalde para seguir “vendiendo” la viabilidad de un proyecto que supondría la demolición de La Mundial y la construcción de un hotel de diez plantas.

Sin embargo, era falso. En realidad, el plazo de solicitud de esos fondos había expirado el 22 de junio, y el promotor no los solicitó por carecer de proyecto de urbanización y licencia, requisitos indispensables para su solicitud. Además, el proyecto debía contar con un plan de sostenibilidad ambiental, inexistente en este caso.    

De este modo, promotor y alcalde han tratado de engañar a la ciudadanía prometiendo la inminencia de cuantiosos fondos europeos para conseguir el apoyo mayoritario al proyecto, al ser insuficientes los votos del PP.

Que el “Hotel Moneo” nunca se haría ya lo sabían hacía tiempo el alcalde, el promotor y su banco acreedor. Pero al menos, tendrían una parcela libre en pleno centro, sin “el problema” de un edificio icónico como “La Mundial”, y con una ordenación que ahora les permite edificar diez plantas. Un bocado muy apetitoso para especular, saldar las deudas y obtener buenos dividendos. 


El 1 de diciembre, dentro de 60 días escasos, expira el plazo para que el promotor pague su deuda millonaria al Ayuntamiento. Si no lo hace, al alcalde no le queda ninguna excusa, ni siquiera falsa, para resolver el convenio, reclamar daños y perjuicios al promotor, y emprender una nueva ordenación urbanística para la zona, más respetuosa con el edificio “La Mundial” y su entorno. La cuenta atrás ha comenzado. 

(*) Publicado en mi columna "El ala izquierda de la Casona", del diario Viva Málaga el lunes 3/octubre/2016
(**) Imagen: Blog Málaga Duele, 2012